Me recibió Patricia, muy amable y solícita.
Un apartamento muy cuidado con todo lo necesario. Dejaron café, cacao, infusiones, azúcar, sal, zumo de naranja, leche y unas galletas de cortesía. La cama muy cómoda. Aparcamiento subterráneo en las instalaciones. Zona muy tranquila y silenciosa.
Apartado de Santiago, pero a 10 minutos en coche. La zona cuenta con supermercados, farmacia, y varias tiendas.
