Zona muy tranquila y cerca del centro de Santiago, al menos si dispones de vehículo. Lugar ideal para ir con niños, cuenta con una zona de bosque cerca de la vivienda, un parque y zonas comunes peatonales.
El apartamento es muy acogedor y cuenta con todos los servicios para que te sientas como en casa. Lo único que destacaría como mejora es la cama de matrimonio, ya que es de 1,35, quedando algo justa para una pareja. En cuanto a la comodidad, teniendo en cuenta que depende del gusto personal, en nuestro caso, las almohadas nos parecieron demasiado planas y poco mullidas y el colchón demasiado duro y rígido, con lo que si una persona se movía, lo hacía todo el colchón. Pero repito, es cuestión de gustos…en nuestro caso pesamos entre 60-70 kg y hemos tenido esta sensación.
Las responsables de los apartamentos se han mostrado muy atentas y amables en todo momento, un 10! Limpieza impecable, aunque no vendría mal alguna toalla más.
Gracias Rosa y Andrea, ha sido un placer!